En la actualidad es usual ver en periódicos y noticieros una gran cantidad de titulares sobre los conflictos en Medio Oriente. Los medios de comunicación en Occidente se han encargado de que todos conozcan algo del “terrorismo” y la “cruenta violencia” en los países musulmanes. Escuchar sobre grupos como Estado Islámico, Boko Haram, Al Qaeda y otros, es común para los consumidores de medios, quienes no suelen conocer sus particularidades; las noticias, por su parte, solo fomentan la desinformación y la generalización de todos en una misma categoría.
Por lo anterior, resulta preciso preguntarse por la realidad en estos países de Asia y África que practican el Islam, pues es claro que la información emitida en Occidente tiene una alta carga de subjetividad y manipulación de los hechos. El panorama se complica aún más cuando los medios informativos aplican sus lógicas a las dinámicas sociales, políticas y religiosas de aquel otro lado del mundo. Esto se puede evidenciar en la abundancia de etiquetas que se le ponen a aquello que se desconoce: llamar terroristas a los grupos extremistas, denominar árabes a todos los musulmanes o creer que todos los seguidores del islam son yihadistas, por nombrar solo algunas de las imprecisiones que se difunden en el periodismo.
La finalidad, entonces, del ABC de Estado Islámico, es hacer precisiones sobre este grupo pero de una manera desprevenida y sencilla con el fin de que el lector se forme una idea más cercana a la realidad desde una mirada objetiva. Así, conociendo los orígenes de este grupo, sus intereses, sus objetivos, los lugares donde tienen presencia, entre otras cuestiones y hacerlo de manera clara y concisa, permitirá dilucidar dudas y de alguna forma realizar un ejercicio pedagógico con el fin de que la próxima vez que se lea una noticia sobre el tema se haga con un conocimiento previo.
Por lo anterior, resulta preciso preguntarse por la realidad en estos países de Asia y África que practican el Islam, pues es claro que la información emitida en Occidente tiene una alta carga de subjetividad y manipulación de los hechos. El panorama se complica aún más cuando los medios informativos aplican sus lógicas a las dinámicas sociales, políticas y religiosas de aquel otro lado del mundo. Esto se puede evidenciar en la abundancia de etiquetas que se le ponen a aquello que se desconoce: llamar terroristas a los grupos extremistas, denominar árabes a todos los musulmanes o creer que todos los seguidores del islam son yihadistas, por nombrar solo algunas de las imprecisiones que se difunden en el periodismo.
La finalidad, entonces, del ABC de Estado Islámico, es hacer precisiones sobre este grupo pero de una manera desprevenida y sencilla con el fin de que el lector se forme una idea más cercana a la realidad desde una mirada objetiva. Así, conociendo los orígenes de este grupo, sus intereses, sus objetivos, los lugares donde tienen presencia, entre otras cuestiones y hacerlo de manera clara y concisa, permitirá dilucidar dudas y de alguna forma realizar un ejercicio pedagógico con el fin de que la próxima vez que se lea una noticia sobre el tema se haga con un conocimiento previo.
A. ¿Cómo funciona?¿Quiénes son?, ¿cuál es su accionar?, ¿qué significan sus símbolos?...
|
B. El retorno al pasadoEl EI tiene algunos referentes históricos que se deberían conocer para analizar la situación actual.
|
C. Las creenciasLa religión es un eje central en el surgimiento de este grupo, ¿de dónde provienen estas religiones?, ¿qué profesan?, ¿qué conexiones hay con otras religiones mundiales?
|
D. La geopolítica¡Alto! ¿Qué pasa en el mundo?, ¿qué dicen otros países?, ¿cómo se ven afectados?
|